VISITA DEL RATONCITO PEREZ

El dia 27 de octubre del 2010 se me cayó un diente en el comedor del coleguio, era un colmillo.
Con ese colmillo se me han caido 11 dientes. Un amigo mio me ha dicho que si se te cae un colmillo
a los siete años es malo porque se significa que te los lavas mal, yo no me lo creo y ademas yo no me los lavo mal, me los cepillo 3 minutos.
Por la noche prepare todo muy bien estaba muy impaciente, hasta que llegó la hora de dormir.
A las 7 de la mañana me desperte, ¡ Y vi regalos debajo de la cama!, desperté a Diego rapidamente y como no se despertaba le dije: "el ratoncito Pérez te ha traido videojuegos". Diego se despertó rapidamente y vió que le había traido una funda para los cartuchos. A mí me regaló un estuche y un peluche de Tigger cuando era pequeño.

" Tatan, la canica va a rodar"

MENUDO DÍA

El 10 de octubre fuimos a ver una la peli , se llamaba "Bru mi villano favorito". Trataba de un villano que adopta a tres niñas para robar la luna. Lo que más me gusto fueron unos mostruitos que se llaman Minions. Son amarillos bajitos . Su enemigo se llama "Victor ", es multimillonario y de mascota tiene un tiburón.

Helado bajo el agua

Estabamos Diego, Martín y yo en el borde de la piscina de pequeños de Valencia de Don Juan, teníamos un helado cada uno, Martín metió el pié en el agua y como había una cuesta se resbalo cayó y se mojo todo incluso el helado.

Adios puntos

El 22 de julio me quitaron los puntos, ahora solo tengo una rayita. ¡ah! ¿y sabeis como me caí?, pues os lo explicare: yo me estaba duchando y de repente como no podia ver por culpa del agua me tropece para adelante y con el borde de la bañera me di en la barbilla, y aqui empieza la historia de mi brecha.

Un puente demasiado humedo

Estabamos dando un paseo todo parecia que estaba en orden, pero cuando volviamos empezó a llover y ¡ cada vez llovía más fuerte! .Al llegar en el cruce había una charca enorme, como no podiamos pasar se me ocurrio una idea ¡ Hacer un puente de rocas! .Mi papa encontró tres piedras y las colocamos en fila encima de la charca, en unos cuantos minutos empezó a pasar gente. ¡ que divertido! .

El señor grande

Cuando yo era pequeñita en Oviedo estabamos en un paso de cebra, de repente yo dije: mira mama, mira que señor tan grande. En aquel momento el señor sonrio.